viernes, 1 de noviembre de 2013

En el ocaso del ciclo estudiantil

Por: Albert E. López.

Saber que lo que un día fue, ya no será más, los seres humanos experimentamos diferentes facetas a lo largo de nuestro paso por esta vida. Justo cuando escribo esta columna viene a mi mente que dentro de no sé, una o dos década viviré de recuerdos que han marcado mi vida y para ese momento Dios sabrá donde me tendrá.

Al ver las postales que nos hemos tomado con mis compañeros de Licenciatura en Ciencias de la Comunicación, del Centro Universitario del Sur Occidente –CUNSUROC USAC- me trae nostalgia el saber que en un año más, ya no compartiremos el salón de clases, cada quien andará por rumbos diferentes.

Esto como una de las lindas facetas de la formación educativa en mi vida y que me ha preparado para enfrentarme a este mundo indiferente. Tampoco quiero descartar otros espacios donde he aprendido y a la vez compartido con otros hermanos, desde luego hoy se les reconoce y a la distancia se les agradece por los momentos vividos y bien vividos.

Le podrá parecer una misiva de despedida, pero no, no creo que sea de esa manera. A mis compañeros de estudio siempre los llevaré en el corazón, cada uno de ellos tendrá mi reconocimiento sincero y desearles un millón de parabienes, todo lo que se tracen lo puedan alcanzar.

Para los catedráticos que con esfuerzo y valentía de forjar nuevos ciudadanos de bien, se esmeraron por impartir el pan del saber, teniendo para ello uno de los dones más grandes de la vida, mística de enseñanza, se les quiere y se les aprecia por la loable labor docente a lo largo de varios meses y años. Su sabiduría impartida será diseminada por el andar de la vida.

Saber que muchas cosas que son buenas, toca algún día dejarlas es bastante complicado aceptarlas, pero como humanos mortales tenemos que aprender a vivir a ese ritmo de vida. La mayoría de vicisitudes que me han pasado han sido buenas, puedo decir que irrisorias cosas han sido malas y que desde luego he aprendido de ese ciclo.

A mis compañeros de estudio se les estima, a la vez de reconocer que en algún momento hemos tenido malos entendidos, pero eso no ha sido obstáculo para seguir juntos y llegar a la meta que nos hemos trazado. Objetivo que esperamos en Dios poder alcanzarlo con mucha humildad y sencillez, reconocimiento desde luego a todos los docentes que han sido pieza fundamental para uno de los sueños de todo estudiante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario